Estoy sentada en la cafetería después de desayunar y de haber leído el periódico.
Los Miércoles entro a las 9 de la mañana porque salgo a las 5 de la tarde, así que como llego al trabajo a las 7:30 más o menos me vengo a la cafetería donde siempre desayuno y tranquilamente tomo un café con tostada.
Ayer fue un gran día, cansado pero intenso. Fuimos hasta un pueblo de Badajoz, Olivenza, para firmar ante notario la compra de la casa.
Salimos de casa a las 7 de la mañana y llegamos a las 11 donde nos esperaban con el papeleo. Salimos de la notaría a las 12:30 y fuimos a un pueblo de Portugal a comer con los niños para celebrar que la casa de nuestros sueños ¡ya era nuestra! Por fin después de estos meses luchando con los bancos lo conseguimos.
Acabamos de comer y regresamos a casa, llegamos a las 7:30 de la tarde tan cansados que no teníamos ni hambre. Aunque como era Martes, pedimos unas pizzas, ya que en casa es una tradición que los Martes se cena pizza y los llamamos los Martes locos por la propaganda del Telepizza, aunque solo comemos una vez al mes las pizzas del Telepizza (la economía es lo que permite) y el resto de martes las compro en el super.
Así que a eso de las 10 ya estábamos todos metidos en la cama para dormir.
Lo más curioso de todo es la sensación de mis hijos, los 2 al volver del viaje, después de 4 horas de coche para ir, 2 horas en la notaría y 4 horas de coche para volver, decían que había sido uno de los mejores días de sus vidas ¡jamas lo olvidarán! y yo me siento tan afortunada de que mis hijos disfruten de pasar un día a nuestro lado, un día al lado de sus padres, un día tan importante como la compra de la casa en la que vivimos que solo puedo pedir para que mantengan ese espíritu tan limpio, enérgico, agradecido y lindo y dar las gracias por tener estos 2 hijos tan increíbles.
Y también doy gracias por tener a mi marido a mi lado que ha luchado cada día durante los últimos 4 meses para conseguir cerrar con el banco y con los vendedores el contrato.
Sin olvidarme de dar las gracias a mi familia, porque tengo unos padres y unos hermanos dispuestos a confiar en mi y ayudarme siempre en lo que necesite.
SOY TREMENDAMENTE AFORTUNADA.
No hay comentarios:
Publicar un comentario